El coaching no existe.

Imagino que es sorprendente encontrar esta afirmación en una página que habla sobre coaching, pero es lo que realmente pienso. Hay tantas versiones y vertientes profesionales en torno a este término que me permito afirmar que el coaching, como tal, no existe. No es nada y al mismo tiempo es muchas cosas.

Podemos distinguir cuándo un color es verde o no lo es. Incluso es posible que exista una definición científica sobre el umbral de longitudes de onda de la luz en los que se mueve el color verde. Casi todos coincidimos en cuándo un objeto es verde y cuándo no. Lamentablemente esto no sucede con el coaching.

A día de hoy, definir qué es el coaching se me hace tan complicado como explicar a qué huele el color nueve.

Y esto es así porque hablando con compañeros o leyendo libros de coaching, cada uno lo vive de una forma distinta. Muchos se atreven a afirmar lo que no es coaching, refiriéndose a procedimientos diferentes de los suyos y muchos aseguran seguir las pautas de algunas organizaciones de forma que a mí me cuesta ver la similitud entre la definición y la práctica real.

Como me gustaría contar con algo tangible para que todo lo que escribo y publico tenga un marco lógico, paso a explicar qué es el Coaching Realista®, ya que es una marca propia y por tanto me siento con toda la autoridad que necesito para definirla.

El Coaching Realista es un proceso compuesto por conversaciones en las que el coach se encarga de estimular el razonamiento y la reflexión por medio de las preguntas. La persona (el cliente o coachee) se encargará de identificar lo que le motiva o limita, y el coach le ayudaré sin emitir opiniones ni juicios para que la persona decida qué es relevante.

Uno de los objetivos de estas conversaciones es que la persona tome conciencia de aspectos en los que no ha centrado su atención hasta que el coach hace una buena pregunta limpia, sin influir en sus ideas y que lo lleva a encontrar sus propias soluciones tomando sus propias decisiones.

Y esto ¿Para qué sirve?

Sirve para que la persona encuentre sus propios recursos para resolver sus propios retos. Esos que se pueden conseguir por uno mismo pero que no se están consiguiendo. Dicho más en positivo, se trata de avanzar hacia las metas propias de la forma más eficaz y eficiente posible para cada uno.

En cierta forma es como multiplicar la capacidad de razonamiento del individuo, aunque sería más correcto presentarlo como un método para retirar obstáculos al proceso de pensamiento.

Como no quiero repetirme, te invito a visitar carlosmelero.com donde encontrarás más información sobre el Coaching Realista.

Un comentario

  1. En el tiempo que llevo dedicándome a esto he encontrado a muchas personas que al explicar lo que es coaching te explican el coaching que ellos hacen.

    En las cuatro escuelas en las que me he formado enseñan técnicas que te cuentan que no debes usar en el examen porque no aprobarías.

    Profesores que se contradicen en elementos básicos (también en ambos casos), escuelas que (bajo el mismo paraguas de certificación) dan pautas diferentes, prácticas dispares que (a mis ojos subjetivos) son más espectáculo que realidad…. me sirven para llegar a la conclusión de que el coaching no existe.

    Sólo existe la visión que cada uno tenemos del coaching y, por lo tanto, existe tú coaching y mi coaching, no EL coaching. Y el hecho de que un grupo de personas estén de acuerdo en describirlo de una u otra forma no hará que sea cierto, sólo que hay un acuerdo entre ellos.

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