El modelo de Coaching Realista Centrado en la Persona se realiza por medio de la conversación y cede toda la responsabilidad al coachee (o cliente). Considera que aplicando unas guías se puede establecer un diálogo que permite a la persona liberarse de barreras inconscientes y avanzar en sus propios pensamientos.

En el curso de Coaching para Padres repasamos los componentes más importantes y, sobre todo, los que tienen aplicación en las relaciones familiares.

No pretendo que se utilice con un niño de 7 años como si fuera un cliente de coaching sino que se interioricen los conceptos para poder aplicarlos de forma instintiva en las interacciones breves y puntuales con niños pequeños y se desarrollen en la medida de lo posible con jóvenes más maduros.

Tengo la convicción de que si mantenemos esta forma de comunicarnos con nuestros hijos desde pequeños, ellos irán creciendo en un contexto en que las conversaciones con sus padres (contigo) les resultarán útiles y de forma natural las buscarán para resolver sus dudas. Pocas cosas me han reconfortado más en la vida que mi hijo buscando aclararse por medio de una conversación, cuando lo que hago, principalmente, es ofrecerle mi escucha para que aprenda de sus propias vivencias. Creo que esto es algo que todos los padres y madres son capaces y tenemos la responsabilidad de ofrecérselo a nuestros hijos, del mismo modo que me hago una idea de lo complicado que resulta esto para quienes no hemos crecido disfrutando de este privilegio.

El padre-coach aprende a escuchar a sus hijos para que liberen su mente, desarrolla su tolerancia y les permitir sacar su mejor versión para que crezcan como la persona que pueden llegar ser.

¿Te apuntas?

https://carlosmelero.com/escuela-de-coaching-para-padres/

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